—Sabe a meados,
¿eh?
Hay un tipo de
negro a mi lado. Corte militar. Pequeños ojos oscuros. Dientes amarillentos. Y
por el tejido de su guardapolvos, dicen que es piel de tiburón, shagreen, y por la sucia mueca en ese
rostro ajado que ronda los cincuenta poniendo de manifiesto que sabe quién soy
deduzco que pertenece a la Nueva Stasi.
—Tiene ese punto
a hidrocarburo que tanto me gusta —rezongo acabándolo de un trago y veo
desaparecer a la chica con el vestido ajustado—; si te repugna quizás sea
porque has nacido en la época equivocada.
—En absoluto.
—Da una calada a su cigarrillo a través de una boquilla lacada en ámbar—. ¿Ingwolf,
verdad?
—¿Estarías ahí
sentado si no lo fuese?
—Bastaba con que
me hicieseis una llamada.
—No tienes
teléfono, no tienes casa…
—Cierto, llevo
semanas durmiendo en cafeterías y duchándome en casas de amigos.
La densa
humareda de tabaco del local no es suficiente para ocultar a mis ojos las siluetas
de un par de tipos duros moviéndose por el local. Una parodia de maniobra
envolvente. Y agarro uno de los cigarrillos del hombre del gobierno antes de
continuar.
—Supongo que la
idea es detenerme.
—Nadie puede
azuzar a las masas contra el Estado y salir impune. —Toma aire—. Prometo ser
rápido y a tu familia sólo se le cobrará una bala; tienes mi palabra.
—¿En serio?
—inquiero acercando mi rostro al suyo—. A ver qué te parece mi oferta, seré aun
más rápido y no le cobraremos nada a la tuya.
Mira sin
comprender segundos antes de que uno de mis hombres lo atraviese en el costado
en repetidas ocasiones con una navaja. Una, dos, tres veces y el tipo fuerza
una sonrisa carmesí mientras, a la altura de su hígado, se entremezclan la
sangre y el carburante al salir a borbotones. Mi otro hombre, el que fue hacia
la puerta, asiente haciéndome saber que el Infierno se va a desatar en breve
sin que la treintena de snobs que forman la clientela puedan siquiera
imaginarlo.
Y mientras, alrededor, revolotean las notas de un viejo tema de Andy Williams…
6 comentarios:
Hoy estoy espesa y el humo de tu relato me nubló más, si cabe... Pero no tanto para que lo disfrutara y mucho!!!
"...si te repugna quizás sea porque has nacido en la época equivocada..." Me encantó esta frase, me hizo pensar que muchas veces me siento así, como si hubiera nacido en la época equivocada.
Besos y feliz inicio de semana
Muy bueno, Borja! Me ha gustado mucho, amigo. Tienes un estilo muy personal para escribir. Me gusta esa onda thriller bizarro. Un placer leerte. Un saludo para tí!
Muy interesante tu blog. Me gusta como escribes...este relato en particular... parece como si estuvieras realmente viendo una película...fantástico...!!!
Y me gustas porque todos tus escritos tienden a lo revolucionario...eso es genial...
Un abrazo!!!!!!!!!!!!!!!
Maravilloso. En unas pocas lineas construyes un mundo y me dejas con ganas de saber más.
¡Un abrazo!
Laura: Supongo que en algún momento todos hemos llegado a pensar/desear que hemos nacido en el momento equivodado; en otro tiempo podríamos haber dado lo mejor de nosotros.
Beeborjas: Agradezco que una cuasitocaya describa como thriller bizarro uno de mis escritos... es quizás una de las críticas más sugerentes que he recibido.
Bohème: Creo que si perdemos el instinto revolucionario lo perdemos todo; en base a los cambios, bruscos o no, se ha sustentado nuestra evolución... para bien o para mal.
LGG: La verdad es que me ha costado encontar el tono aunque hace tiempo que ronda mi cabeza ese fabuloso universo Dieselpunk donde pretendo ubicar una serie de novelas cortas... veamos si no desfallezco de camino.
Rápidos, contundentes y certeros. El cuento y los navajazos, I mean.
Muy logrado, sí.
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